Ahora que se están celebrando gran parte de las semanas de la moda, en breve comienza Milán, estos días está siendo Madrid, y también Portugal, cómo no, celebrará muy pronto unos días dedicados a la moda, a las tendencias, a lo que llegará en la Primavera que entra y que en muy breve espacio de tiempo, sino a la par, vemos ya expuesto en versión low cost, copiado y apto para ser consumido por un grueso de público mucho más amplio. La copia, hoy por hoy, es la gran protagonista del consumo, en muchas y diferentes versiones. Personalmente recuerdo alguna salida de producto en Milán y teléfonos móviles de los allí presentes fotografiando hasta el interior de los cajones, tornillos, herrajes, manillas…El resultado era que en menos de lo que cantaba un gallo, la copia estaba al alcance del consumidor.
Las primeras marcas que cuentan con estudios de diseño y creatividad realmente importantes, invierten mucho dinero en ellos, hay mucho tiempo, mucho esfuerzo y muchas horas de estudio y trabajo detrás de un buen original, detrás de la creación de algo que aporta innovación y en el caso del diseño también utilidad, en un mundo en el que prácticamente está todo más que inventado y en el que también es cierto, en muchos casos, y debido a la presión del mercado (en moda son dos ó más colecciones las que se sacan al año en mobiliario una colección en accesorios otro tanto…), se innova por innovar y difícil es de calibrar si lo nuevo realmente es interesante.
La copia publicita al original y a la inversa y parece que ambos han llegado a un pacto de convivencia en el mercado, quizás hoy por hoy lo que triunfe en el consumo de la clase media es la copia customizada, un tanto revisada ó personalizada por alguna de las marcas del segmento medio del mercado, y centre el grueso de sus ventas en Occidente, en los paises europeos, dejando el mayor consumo de originales a los mercados asiáticos, debido al desplazamiento del poder económico hacia el Este. Pero…¿qué pasa con la creatividad?, ¿cómo evoluciona el original en ésta tesitura?. Es una evidencia que la tendencia de gusto y el poso cultural de las economías más consumidoras de primeras marcas ó mercado del lujo, es diferente a la europea; China, Japon, Rusia, ó en el caso de Portugal las antíguas colonias como Angola ó Mozambique, son consumidores del mercado del lujo en Europa; ¿hasta qué punto esto afecta a la creación de originales?. ¿son diferentes sus pautas estéticas.?. Personalmente y en mi humilde opinión creo que si, ya no en términos de colorido ó estética, sino en términos de presencia, en líneas generales, y salvo pocas excepciones, se tiende a la sensación de opulencia, suelen ser diseños pretenciosos muy lejos de aquel racionalismo conceptual que dio lugar a la creación de grandes diseños en los inicios del siglo XX.
Y vosotros…¿cual es vuestra opinión?.
← FASHION, THE TRUE COST. THE QUALITY, THE NEXT STATION. LAMPS. ARTICLE 1. →